En el marco del juicio oral y público por el siniestro del supermercado Ycua Bolaños, el Tribunal de Sentencia que juzga el caso escuchó la versión del presidente de la cadena de supermercados Juan Pío Paiva. También, estaba prevista la declaración del hijo del empresario, Víctor  Daniel Paiva.

Pío Paiva negó ante el colegiado que las puertas hayan estado cerradas, y se  escudó en los informes elaborados por los bomberos que realizaron la cobertura el 1 de agosto del 2004. En ese sentido, aseguró que el 95% de los bomberos voluntarios que trabajaron esa fecha señaló que las puertas estaban abiertas y que el capitán del cuerpo de Santísima Trinidad dijo, incluso en el juicio que llegó al supermercado a las 11:34 y que se instaló sobre la avenida Artigas frente al estacionamiento, pero que no pudo ingresar por ese lugar por la cantidad de humo y gases que habían.

El acusado agregó que por ese motivo el bombero se dirigió a la puerta principal ubicada sobre Santísima Trinidad y Artigas y que por ahí pudo ingresar hasta el entrepiso, pero que de allí ya no pudo avanzar por la cantidad de humo y por el fuego, posteriormente, se dirigió nuevamente al estacionamiento, pero que tampoco pudo ingresar.

"Así declaró el capitán del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Santísima Trinidad, quien fue el primero que estuvo presente en el accidente", manifestó Juan Pío Paiva ante la consulta del fiscal Edgar Sánchez sobre si las puertas estaban o no cerradas el día del siniestro.

A la par de manifestar que siente un profundo dolor por las tantas víctimas que dejó el siniestro, señaló que tuvo la intención desde el principio de colaborar con las mismas, pero que sus bienes fueron embargados inmediatamente. También, dijo que por medio de su abogado, Luis Escobar Faella se puso a disposición para ayudar a las personas afectadas.

En prosecución del juicio, también estaba prevista la comparecencia del hijo del empresario, Víctor Daniel Paiva, uno de los  acusados en el caso.