La presentación del libro estuvo a cargo del doctor Carlos Portillo, comisionado del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, quien resaltó el contenido de la obra y sostuvo que el libro es una de las maneras de sobreponerse de parte del autor de todo lo que pasó estando en prisión durante casi 9 años y de seguir luchando en la actualidad.

“Su libro es producto de haber estudiado el uso de la prisión en una diversidad cultural tal como la de los aztecas, los mayas, del imperio incaico y de la época precolombina. Los hechos que hoy compartimos, como el hacinamiento, el trato prácticamente sin límites a condiciones crueles, inhumanas, degradantes, no son hechos presentes, sino consecuencia del pasado, de una tendencia a reproducir el mismo comportamiento hacia esa población discriminada, marginada, excluida”, indicó el doctor Carlos Portillo.

Por su parte, el juez José Agustín Fernández, director del Museo de la Justicia, Centro de Documentación y Archivo para la Defensa de los Derechos Humanos, señaló que el libro es un alegato de aquellos que no tienen voz, “es a favor de los condenados y de esas personas que están hacinadas en nuestros núcleos penitenciarios. Este libro que nos presenta es de recomendación obligatoria para estudiantes, la ciudadanía en general y para jueces; este libro producirá opiniones y será un testimonio más a favor de los derechos humanos”, manifestó el magistrado.

A su turno, el autor del libro, Rafael Alejandro Mella La Torre, indicó que el libro en general es producto de una investigación con el deseo de exponer una situación de las diferentes cárceles.

“Si nosotros como sociedad no nos interesamos por aquellas personas privadas de su libertad, van a volver a la sociedad con la intención de cobrar revancha, entonces la regeneración depende principalmente de nuestras autoridades y de la sociedad misma”, manifestó Mella La Torre.