El Libro de Indicadores sobre el Derecho a un Juicio Justo fue elaborado con la metodología del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos con el apoyo del Comité de Prevención de la Tortura de la ONU. Significará la oportunidad de analizar la gestión desde una mirada centrada en la persona, en cumplimiento del objetivo estratégico 6 de la Corte Suprema de Justicia, de difundir y controlar la vigencia de los derechos humanos en la política, sentencias, normativa y el accionar del Poder Judicial, y rendir cuentas a la ciudadanía y a los foros que correspondan.

En la ocasión la ministra Alicia Pucheta de Correa resaltó la importancia del material, teniendo en cuenta que permite ver las debilidades existentes en lo que se refiere al acceso a la justicia. “Estos indicadores son importantes en materia de derechos humanos porque nos permite encontrar en forma objetiva cuáles son las debilidades que tenemos en el acceso a la justicia; contar con datos objetivos es la única manera de ir avanzando en el mejoramiento del servicio de justicia, estos indicadores dan seriedad al trabajo de una institución”, señaló la ministra Pucheta.

Manifestó que a nivel internacional también tiene sus efectos, ya que permitirá unificar criterios con otros países que trabajan con los mismos indicadores e incluso contrastar cómo funciona en dichos países. Agregó que el objetivo principal es avanzar en lo que hace al acceso a la justicia, especialmente de las personas en situación de vulnerabilidad.

Por su parte, Nury Montiel, titular de la Dirección de Derechos Humanos de la Corte, señaló que el material permitirá contar con informaciones claras para una mejor evaluación y seguimiento de lo que sucede en el ejercicio de la función jurisdiccional, orientada especialmente a vigilar los derechos humanos que se tutelan en su ejercicio.

“La aplicación de esta matriz de indicadores será de alcance nacional, la cual incluye una matriz que amplía garantías procesales judiciales y también a la protección especial de niñas, niños y adolescentes. Los indicadores fueron previamente validados por los representantes de todas las circunscripciones judiciales del país y la Corte Suprema de Justicia, que de esta manera reafirma su compromiso con el respeto, cumplimiento y observancia de los derechos humanos”, indicó Nury Montiel.

En tanto Liliana Valiña, de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas y asesora de los Derechos Humanos ante el Paraguay, señaló que el derecho a una justicia independiente e imparcial y el acceso a la justicia de las personas en situación de vulnerabilidad, así como la igualdad en la aplicación de la ley y el derecho a un juicio justo, son parte de la vigencia de los derechos humanos y allí radica la importancia del material.

A su turno, Gabriela Knaul, relatora especial de las Naciones Unidas, sostuvo que los indicadores son un marco referencial para el perfeccionamiento de los derechos humanos en el Paraguay y un ejemplo para los demás países de Latinoamérica y de otras regiones. ”Es esencial establecer indicadores cualitativos y cuantitativos para que se evalúe el acceso a la justicia y para que se fortalezcan la independencia, imparcialidad, integridad, corrección, competencia y transparencia del sistema judicial”, manifestó la relatora especial de las Naciones Unidas.

Cabe señalar que Paraguay es el primer país en Sudamérica y el segundo en Latinoamérica en implementar los indicadores sobre el Derecho a un Juicio Justo.