Mientras que el segundo lugar fue otorgado a los representantes de la Universidad Nacional de Asunción y la Universidad del Norte, en el rol de la Defensa y en el rol del Ministerio Público, respectivamente.

Los estudiantes ganadores de la competencia participarán en la actividad “moot court” organizada por la American University, con sede en Washington, EE.UU. Los ganadores de los segundos lugares recibieron certificados de participación, medallas y trofeos, además de materiales académicos donados por el Centro de Estudios Judiciales.

La doctora Pucheta felicitó a los participantes e instó a los que no lograron llegar a los primeros puestos a no desmotivarse y que sigan con las capacitaciones que fortalecerán su desempeño como profesionales del derecho.

Por otro lado, destacó el trabajo realizado por la Dirección de Derechos Humanos y agradeció la participación activa de todos los magistrados/as judiciales que formaron parte del Comité Evaluador de la competencia.

Por su parte, la directora de Derechos Humanos, abogada Nury Montiel, congratuló por haberse cumplido con el objetivo de la competencia de estimular la conciencia y el respeto a los derechos humanos y a las capacidades de litigación oral entre los y las estudiantes a través del conocimiento y la aplicación de valores y principios e instrumentos jurídicos nacionales e internacionales.

Recordó que otras de las finalidades de esta competencia es lograr la participación progresiva de las facultades de Derecho de todo el país a través de la colaboración de las circunscripciones judiciales.

La directora ejecutiva del Centro de Estudios, María Victoria Rivas, resaltó la importancia de la competencia desde el enfoque de derechos humanos. También agregó que este tipo de actividades ayudará al mejoramiento del sistema de justicia.

Cabe recordar que las universidades que participaron, además de las ganadoras, fueron Columbia, UTCD, Americana y María Serrana.

El concurso estuvo organizado por la Dirección de Derechos Humanos de la Corte Suprema de Justicia, con el apoyo técnico del Centro de Estudios Judiciales (CEJ) y el Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH).