Con respecto a la mora judicial, el ministro mencionó que, si bien es un problema real, se ha logrado superar en algunas circunscripciones, como en Caaguazú, donde se tramitan con celeridad una gran cantidad de juicios orales, reduciendo considerablemente el número de expedientes.

Sin embargo, el doctor Ramírez Candia señaló que este problema persiste en jurisdicciones con mayor volumen de causas. En cuanto a la mora en la Corte Suprema de Justicia, explicó que es una situación que no se puede ignorar y atribuyó parte del problema al proceso de integración de la sala, cuando algún ministro se inhibe. Aseguró que es posible superar este obstáculo mediante un mayor control y el compromiso de los funcionarios encargados de la tramitación.

En cuanto a su gestión en la Sala Penal, el ministro destacó que ejerce un estricto control sobre los funcionarios, y que los expedientes de integración no permanecen más de dos días en su despacho. Subrayó que la Corte Suprema impulsa mecanismos de control, como los sumarios administrativos contra magistrados y profesionales del derecho que dilatan los procesos.

El doctor Ramírez Candia recordó que, durante su tiempo como miembro del Consejo de Superintendencia, se dictaron un total de 1.901 resoluciones en el marco de sumarios administrativos, con sanciones a escribanos, la casación de matrículas de profesionales, y más de 250 abogados sancionados, además de varios funcionarios. “Lo importante es controlar y tomar las medidas correctivas, y no ser cómplice de la mora”, afirmó.

Por último, mencionó que en la Sala Penal se ha implementado el mecanismo de trámite simplificado: “Cuando, por ejemplo, un recurso de casación es objetivamente inadmisible, se realiza un proyecto único que corre en forma de duplicado para su posterior lectura y firma”.

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