Tribunal escucho a testigos y rechazó pedido de fiscalía
Prosiguió hoy el juicio oral y público que juzga por el delito de enriquecimiento ilícito al ex presidente de la República, Luis Gonzalez Macchi, su esposa Susana Galli y al empresario Reinaldo Domínguez Dibb. En ese marco, declararon cuatro testigos propuestos por la defensa. Por otro lado, el Tribunal de Sentencia, además de rechazar el pedido de la fiscalía de la exclusión de algunos testigos, libro oficio a la Policía nacional para que acerque a los que no se presentaron a comparecer para la hora indicada.
Con la declaración de cuatro testigos propuestos por la Defensa prosiguió en la fecha el juicio oral y público en el caso que juzga el enriquecimiento ilegitimo del ex presidente de la República, Luis Ángel González Macchi, su esposa Susana Galli y al empresario Reinaldo Domínguez Dibb, quien además es juzgado por soborno.
El primero en brindar su declaración ante el Tribunal de Sentencia fue Bernardo José Gabriel Valet, quien según dijo mantuvo relaciones comerciales con la ex pareja presidencial, al alquilarle una vivienda.
En ese sentido, declaró que desde marzo de 1995 hasta enero de 1999 Luis González Macchi y su esposa rentaron un inmueble ubicado en Murtillo 985 casi Sargento Gauto y que el monto pagado por el alquiler fue de 850 dólares mensuales, que posteriormente aumentó a 900 dólares y finalmente, se redujo a 2 millones de guaraníes mensuales. Aseguró que en ocasiones pagaba la renta en efectivo y otras veces en cheque.
Posteriormente, declaró Mario José Romanach González, tío de Susana Galli. Sostuvo que a mediados del 2001, con Susana y Jorge Galli invirtieron para obtener renta unos 240.000 dólares, de los cuales el testigo puso 80.000 dólares, Jorge 50.000 dólares y Susana Galli 110.000 dólares. Señaló que los 80.000 dólares que invirtió fueron productos de su ahorro a lo largo de 40 años.
Otro de los que declaró fue Eduardo Insfrán, ex marido de Judith González y quien en 1990 se desempeñaba como administrador de las propiedades de la familia González Macchi ubicadas en Fernando de la Mora y Lambaré.
Por último el Tribunal escuchó a Roque Miranda, quien dijo ser amigo de la familia González Macchi. Este señaló que fue representante legal de Saúl González durante un litigio iniciado en contra de una firma de propiedades por retraso en el pago de unos pagares. Señaló que finalmente, se llegó a un acuerdo y que en ese sentido Saúl González recibió la suma de 450 millones de guaraníes.
Por otro lado, el Tribunal de Sentencia rechazó el pedido de exclusión de testigos formulado ayer por la fiscalía y libró oficio a la Policía Nacional para que traiga a los mismos ante el colegiado para la correspondiente comparecencia. Dio, además un plazo de tres horas para que la institución policial informe del resultado del oficio librado.
Tras la declaración de los cuatro testigos propuestos por la defensa se pasó a presentar las pruebas documentales y en un momento dado el Tribunal llamó la atención al abogado José Ignacio González Macchi y le pidió que modere su tono de voz, ya que el letrado se opuso a la presentación de un informe de Inforconf solicitado por la fiscalía.
Dicho informe hacia alusión a una demanda en contra del ex Presidente de la República hecha por la señora Crescencia Rivarola por un monto de 14 millones de guaraníes.
