El convenio surgió teniendo en cuenta que ambas instituciones tiene el mismo interés público y responsabilidad social de poner a disposición de potenciales usuarios el servicio de Mediación, logrando de esta manera una pronta resolución de conflictos y la descongestión de los juzgados.

En este sentido, uno  de los principales puntos considerado en el acuerdo es el de establecer relaciones de colaboración académica y científica, destinadas al desarrollo de la Mediación, realizándose en forma conjunta jornadas de carácter profesional, como cursos, seminarios, conferencias y todo tipo de actividad destinado al perfeccionamiento de los profesionales del área. Asimismo, realizar entre ambas instituciones estudio y proyectos de interés.

Otro punto puesto a consideración para desarrollar durante la vigencia del acuerdo es el de intercambiar materiales didácticos y bibliográficos, como también realizar convenios de colaboración con otras instituciones nacionales y extranjeras para ampliar y mejorar el intercambio de experiencias.

El referido convenio acuerda también que la Oficina de Mediación del Poder Judicial podrá derivar casos que crean conveniente o que no  pueda gestionar, al Centro de Mediación del Colegio de Escribanos del Paraguay, pudiendo utilizar las instalaciones e infraestructuras en el caso que sea necesario para diversos proyectos didácticos, eventos relacionados al perfeccionamiento profesional siempre que esté disponible.

Recordemos que la Mediación es un método alternativo de resolución de conflictos que tiene como fin el acercamiento entre las partes para solucionar las diferencias existentes, satisfaciendo en alguna medida las pretensiones de las partes y manteniendo una relación entre ellas. La Oficina de Mediación del Poder Judicial cuenta con más de 50 mediadores que trabajan en distintos puntos del país, mientras que el Centro de Mediación del Colegio de Escribanos posee un plantel de alrededor de 34 mediadores.

Cabe mencionar que en calidad de responsable de la Oficina de Mediación, firmó el documento la ministra de la Corte Suprema de Justicia, Gladys Bareiro de Módica, mientras que la ministra Alicia Pucheta de Correa estampó su firma en calidad de testigo de honor y por el Colegio de Escribanos lo hizo su presidente, Roberto Escobar González.